Tras horas de tensión, feriantes de La Salada levantaron el bloqueo en Puente La Noria luego de violentos enfrentamientos con un operativo de 300 efectivos policiales que recurrieron al uso de gas pimienta y balas de goma. La protesta, desatada por el cierre del predio tras la detención de Jorge Castillo por lavado de dinero, dejó al descubierto la crisis de miles de trabajadores informales que dependen de la feria. "Nos obligan a esto, no tenemos respuesta", declararon los manifestantes, mientras vecinos y conductores quedaron atrapados en el caos vial. La Salada, histórica fuente laboral para 40 mil personas, sigue en el centro de un conflicto que mezcla economía informal, narcotráfico y supervivencia.